No hay por qué asombrarse tanto. El espectacular progreso económico chino durante los últimos veinte años ha colocado a ese país en los primeros puestos de la economía mundial. Diríamos más bien que ha vuelto a colocar a China allí donde siempre estuvo durante miles de años. Los países occidentales suelen ser muy hábiles para crear una historia universal distorsionada y a su favor. De creer a Europa y a los Estados Unidos resultaría que ellos siempre habrían ocupado los primeros puestos históricos en lo que se refiere a ciencia, economía y tecnología. No es así. Desde el primer milenio antes de Cristo hasta el siglo XVI China estuvo a la vanguardia del progreso tecnológico mundial (brújula, papel, pólvora, estribo…). Descubrimientos chinos copiados por los europeos y sin los cuales los europeos no hubieran podido crear sus imperios coloniales entre los siglos XVI–XX. Este último paréntesis de cuatrocientos años parece estarse cerrando. El éxito de Japón ha resultado ser apenas un anticipo del espectacular crecimiento económico de la India y China. Hay que considerar además la gravitación de los indicadores demográficos y territoriales: Los países–continente asumiran el liderazgo de la economía mundial en los siguientes cincuenta años. Estamos hablando de Brasil, Estados Unidos, Rusia, Australia, India y China. Disminuirá la importancia de los “portaviones” norteamericanos (Japón, Chile). La pregunta es ¿cuál será el comportamiento de los países–continente (sobre todo de China y la India)? ¿Incurrirán en algún tipo de neo–imperialismo económico? La respuesta en el caso de China podría estar en el éxito que a futuro siga teniendo el control político del socialismo sobre los inevitables avances capitalistas que allí están ocurriendo.
*Publicado en Revista Etiqueta Negra, Año 6 - N.° 49, Lima, junio 2007, pág. 56-57.
Ilustración de Sheila Alvarado.
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Muy interesante el artículo.
ResponderEliminarEn las últimas décadas Asia oriental a conseguido un desarrollo económico notable.
El caso más notorio es el de China, la cual nos ha dado sorpresa y lecciones de desarrollo sostenible y bienestar económico.
Un crecimiento del 9% del PBI durante las últimas dos décadas, es un acontecimiento sin precedente.
Este progreso económico chino se debe a muchos aspectos, se pueden destacar algunos:
Primero la introducción de mercados y la apertura de estos al exterior, importando tecnología y capital y exportando productos, basados en la mano de obra barata.
El segundo factor para el desarrollo chino es que las reformas se han hecho desde adentro, sin imposición por parte de los países ricos o instituciones internacionales.
Tercero, las reformas se introducen lentamente, primero se prueba una política en una ciudad, si funciona, esta política se extiende a todo el país y si no funciona se introduce otra política.
Cuarto, según los políticos chinos han establecido mercados tratando de mantener la armonía social, es decir reducir las desigualdades entre las razas, etnias y sexos.
A todo esto se debe agregar el papel de los valores asiáticos para el crecimiento económico, el confucianismo, cuyas enseñanzas han permitido a China comportarse como una nación, estableciendo relaciones mas armoniosas y cooperativas entre el mercado y el estado.
Por último, las políticas muy estratégicas a largo plazo de los gobernantes, que le dan gran importancia a la inversión en la ciencia y la tecnología para brindarle a su pueblo un desarrollo sostenible.
Sencillamente un ejemplo a seguir.
OSCAR JAIR VÁSQUEZ ADRIAZOLA